Las inclemencias meteorológicas, los movimientos estructurales y el paso del tiempo pasan factura a los edificios. El resultado es la aparición de grietas y desperfectos en los muros exteriores, dando lugar a filtraciones de agua que pueden comprometer la estructura de la construcción. Por ello, es de crucial importancia mantener las fachadas en perfectas condiciones, cuidando su mantenimiento y realizando las reparaciones oportunas cuando sea necesario.
Si te encuentras en esta situación, puedes recurrir a Verticales Villarino, empresa especializada en trabajos verticales en Basauri con una larga experiencia. Pero, ¿cuándo es el momento de llamar a los profesionales?
¿Qué es la rehabilitación de fachadas?
Los trabajos de rehabilitación de fachadas son aquellos que se realizan en las fachadas y cubiertas de los edificios para reparar o sustituir los elementos estructurales dañados con el fin de evitar una serie de problemas:
- Aparición de humedades y condensación.
- Pérdida de la estanqueidad, lo que repercute negativamente en la eficiencia energética.
- Hundimiento del edificio, sobre todo en zonas de climas húmedos.
Aunque la rehabilitación de fachadas también incluye pintar o aplicar yeso, no se trata de mejorar estéticamente su aspecto exterior, que también, sino de mantener y optimizar su aislamiento térmico y su protección frente a agentes externos que pueden ser muy perjudiciales.
¿Qué técnicas existen para la rehabilitación de fachadas?
Antes de acometer un trabajo de este tipo es importante que un arquitecto o arquitecto técnico evalúe el estado de la fachada e indique cuál es la solución que más conviene. No obstante, como orientación, indicamos los tipos de trabajos más habituales en base a la experiencia que tenemos en trabajos verticales en Basauri:
- Enfoscado de cemento: es una alternativa muy económica, pero que no incluye aislamiento térmico. También se puede realizar aplicando una sola capa de mortero de cemento, fibras y áridos, con lo que se consigue una amplia variedad de texturas y colores.
- Sistema SATE: consiste en la colocación de un material aislante al muro mediante la combinación de un adhesivo y fijación mecánica. Es una opción económica y eficaz con la que se evita la aparición de puentes térmicos, optimizando la eficiencia energética y, por ende, el confort térmico, ya que reduce las pérdidas de energía a través de la fachada.